Finanzas en pareja ¿Por qué deben manejarlas muy bien?
Todo marcha bien, sin problemas ni preocupaciones, hasta que aparece el dinero. Es to en la Finanzas en pareja en vital para mantener una relación estable.
Muchos dicen que el dinero no compra la felicidad, otros creen que sí. Pero lo que sí es cierto es que el dinero puede acabar con ella. Compañerismo, amistades y hasta relaciones amorosas, han llegado a su fin de una manera drástica por problemas de dinero.
De hecho, un estudio realizado por el Centro Nacional de Estadísticas de Salud (NCHS por sus siglas en inglés) demostró que al menos el 40% (800 mil) de los matrimonios que se registran anualmente en Estados Unidos, terminan por razones ligadas al dinero.
Y es que además del amor, el dinero tiene un importante papel en las relaciones. A través de él se cumplen compromisos, se llevan a cabo proyectos y se realizan inversiones importantes.
La mala gestión de las finanzas, puede hacer que a la pareja se le presenten problemas muy difíciles de solucionar, de allí que muchos toman la decisión de dar un paso al costado.
Ante esto, se hace más que necesario que ambos sumen esfuerzos para cuidar el presupuesto con el que se cuenta, y por tanto, preservar la relación.
Responsabilidades
Una relación se trata de dos, no de uno solo. Aplica para el afecto y también para las finanzas. Por eso, es determinante establecer responsabilidades para cada uno de la relación. Sólo así ambos estarán comprometidos en sus deberes y no utilizarán el dinero para cosas que realmente no lo valgan.
Cuando cada uno cumple con su parte, las cosas fluyen de la mejor manera. Las finanzas se oxigenen y estas permiten tener un mayor control de los gastos que se presentan en el día a día de la pareja. Compartirse los compromisos financieros y no dejar que sea uno solo el que tenga la carga económica, es lo más saludable para la relación.
Aunque se haga de forma individual, los gastos de un miembro tienen repercusión en el otro. Es por eso que es recomendable evitar los excesos y pensar muy bien la decisión de realizar un gasto grande, esto podría afectar en el largo plazo el presupuesto de ambos.
Metas en equipo
Una buena manera de crear y mantener el compromiso con el presupuesto de la relación es crear metas conjuntas. Cuando se trabaja por la felicidad propia y la del otro, el esfuerzo por hacer las cosas de la mejor manera es aún mayor.
Un viaje, una inversión, estudios, vivienda propia o cualquier otra cosa que traiga como resultado un beneficio para ambos, es una fuente de motivación importante para que las finanzas de ambos sean manejadas con más consciencia.
Ese tipo de objetivos se concretan a largo plazo, por ende, al entender que cada uno debe formar parte y trabajar en la misma dirección, se reducirán en gran medida los excesos y los gastos innecesarios. Ir progresando juntos poco a poco y con firmeza, les traerá una enorme satisfacción y felicidad cuando la meta que se planteó, haya sido alcanzada.
